Nos habló de su experiencia en “TU CARA ME SUENA” que le dio la oportunidad de transformarse en los más variados intérpretes de diferentes razas y sexos, de Whitney Houston a Antonio Molina, de Nino Bravo a Montserrat Caballé, de Niña Pastori a Alejandro Sanz. Todo un reto que sería definitivo para que la gente le prestase atención y lo viese más allá de aquel joven que representó a España en Eurovisión con “Algo pequeñito”.
Pudimos conocer un poco más a la persona que hay detrás del artista. Nos contó que curiosamente nunca se propuso ser cantante. Su idea era ser actor y hacer cine quedando finalista en muchas películas aunque nunca ha llegado a hacer cine… todavía. Nos dejó ver lo que normalmente no vemos del trabajo con el día a día del artista, en el que se debe sacrificar muchas cosas para ser reconocido y poder trabajar en lo que te gusta y poder vivir de ello, algo que a sus poco más de cuarenta años, no es fácil de conseguir y menos como cabeza de cartel.